Una de las cosas que tiene la vida moderna de los padres del s. XXI es que cada día hacemos más y más fotografías, en muchos casos para uso inmediato en las redes sociales (muchas veces sin pensar en el perjuicio que podría suponer para los más pequeños la exhibición de sus vidas). Pero lo más normal es que cada uno quiera tener impreso un recuerdo para la posteridad, como esas fotos que nuestros padres atesoran y que están en el álbum familiar.
La tarea principal es la selección de las mismas: la calidad, la luz… mucho móvil y mucha instantánea difícil de revelar. Si nos ponemos serios es interesante conocer los mejores trucos para que las fotos infantiles sean a la vez profesionales y casuales.
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Trucos de fotografía con niños (vía Dzoom) |
Una vez tenemos seleccionadas las mejores fotos, las más divertidas y favorecedoras, es el momento de componer el álbum. Es un momento para el recuerdo, más que una recopilación, de ser originales, de reunir lo mejor de cada casa.
Hay muchas maneras de presentar las fotos, algunas podemos hacerlas en casa con cartulina, pegamento y algún que otro detalle. Hay vida más allá de los fotolibros que se pueden encargar por internet, especialmente para los más manitas.
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Colorido sobre fondo negro, alguna cinta decorativa y las palabras adecuadas (vía Pinterest) |
¿Has creado alguna vez un álbum personalizado para tus fotos de familia?